domingo, 17 de julio de 2016

Reseña: El Cuaderno de Aroha

¡Buenas noches, surcadores de letras! ¿Cómo estáis? ¿Todavía no os habéis derretido por el calor? Bueno, entonces aún tenemos tiempo de leer un libro más jajaja Es broma. Hoy vengo a reseñaros un libro muy cortito y que me sorprendió...
Título: El Cuaderno de Aroha
Autor: Francesc Miralles
Editorial: Destino
Encuadernación: tapa blanda con solapas
PVP: 13'95
Páginas: 155
Argumento: Imagina que descubres un cuaderno escrito por tu alma gemela. Imagina que al final hay una fotografía con un mensaje para ti: "Búscame y te encontrarás". 
Ésta es la historia de Aroha. 
"Querido Alguien: no sé cómo te llamas ni dónde paseas tu tristeza, pero sé que algún día me encontrarás. Algo dentro de mí me dice que existes y que un hilo invisible te une a mí. 
Es sólo cuestión de tiempo. 
Te quiero, Alguien. No tardes en venir. Siempre tuya,
Aroha"


Para los que no hayáis leído la novela, seguramente el argumento os deje con más dudas de las que teníais antes de leerlo. Esta es una historia que gira en torno a Josan, un joven de diecisiete años, que está en un hotel de vacaciones de verano con su abuelo, al que le tiene manía por ser como es (mujeriego, poco empático...). . Cómo no, su abuelo, pese a sus setenta y pico de años, encuentra una mujer que tiene veinte años menos, llamada Anna. Y, casualmente, tiene una hija: Muriel. Pero Josan no quiere hablar con Muriel, una chica un poco rellenita y que viste muy... digamos, resultona. Él está pendiente de un cuaderno que encontró en su habitación (tiene una para él y su abuelo otra), escrito por una tal Aroha, que le hace reflexionar y se siente identificado. Al parecer, se lo dejó olvidado. Pero no todo el cuaderno está escrito, porque la última escrita pone que va a hacer una locura. Josan se preocupa y, en vez de dejar el cuaderno en recepción, decide buscarla, deseando que no fuera demasiado tarde. La novela está dividida en partes, divididas a su vez en capítulos numerados y con título (muy muy cortos los capítulos, por cierto). ¡Ah! Y está narrado por el propio protagonista. 

En cuanto a los personajes, son seis: Josan, su abuelo, Anna, Muriel, Brisbee, Padre Niebla y Aroha. Josan es un muchacho un tanto antipático y solitario; lleva desde los quince con depresión la cual, según los médicos, se debe a no aceptar madurar. Pero él siente que nadie le entiende. Su abuelo es todo lo contrario a él, por eso no le gusta nada tener que pasar las vacaciones con él. Pero será gracias a él su paso a la madurez. Anna, la pareja de su abuelo, tiene una presencia mínima. Se presenta como un personaje alegre y nada metomentodo. Muriel, la hija de Anna, es una chica apasionada del cine y de la escritura. Está acostumbrada a que ningún chico le pida salir y a las miradas de cachondeo de las chicas. Pero a ella le da igual. O sea, es un personaje fuerte y creativo. Me encanta; además, sin ella, no habría historia. Brisbee es el novio de Aroha según Josan lee en el cuaderno. Será el plantón que Brisbee hace a la propia Aroha para que ella se anime a hacer una locura... Josan está decidido a buscarle y se sorprende de ver que... ¡se trata del camarero del hotel! No tarda en preguntarle sobre Aroha. Y el camarero le dice que está en Idilia, donde se ubica una especie de secta cuya filosofía de vida es la de compartir, desinhibirse, mirar las cosas valorándolas al máximo. Allí encontrará a Padre Niebla y, por supuesto, a Aroha. Padre Niebla también me encanta, sobre todo por la carta que le da a Josan.  Josan se sorprenderá a medida que pase los días junto a Aroha, una chica que... no era en absoluto como se la imaginaba ni como se expresaba en el cuaderno...

El final me sorprendió un montón. El momento del descubrimiento fue brutal. Me quedé con la boca abierta, literalmente. Incluso lo tuve que leer un par de veces. ¡Jamás pensé que daría ese giro! Está muy bien esa intriga que hay a lo largo de la historia. Además, como lo narra el protagonista (la historia) pues... el lector solo sabe lo que él sabe.

En resumen, ¿lo recomiendo? Sí. Es un libro con muy poquitas páginas, y la lectura se hace ligera al tratarse de capítulos cortos. Es una novela que va al grano. No encontraréis partes ni fragmentos que sobren o se hagan pesados. Como dice el autor al final, se trata de una novela que mezcla el tema del amor y la psicología. Pero está tratado de tal manera, que podría considerarse un crossover. Creo que es una buena lectura para este verano. A mí me ha gustado mucho. 
Os deseo un feliz domingo.

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